Descripción
Nuevo despertar
Un libro de poemas que te descubrirá la Belleza del Ser en conjunción con el mundo de la naturaleza, donde se detiene el tiempo para contemplar lo que existe en su más elevada realidad. Los poemas, creaciones puras del espíritu, envuelven al lector como una suave piel de seda, contacto sutil que no se interrumpe al cerrar el libro.
Prólogo de Arturo Echavarren
Toda palabra nace del encuentro de un significante o cuerpo sonoro con un significado o imagen conceptual, por lo que en su naturaleza concurre de manera admirable lo físico y lo metafísico. Esta singular dualidad representa fielmente la esencial heterogeneidad de nuestro propio ser. Claro está que somos el resultado de la suma de huesos limitados y anhelos ilimitados, de átomos geométricos y emociones sin geometría, de carnes prietas que afloja burlonamente la gravedad y pensamientos ingrávidos con vocación de eternidad. Por allá van y ancha es Castilla. En esta encrucijada entre la vía de lo material y la senda de lo inmaterial, se alza palpitante y única la poesía de Seda Cruz.
– – – Un diálogo creador – – –
En ella la autora despliega un diálogo creador que, en cuatro brazos de río, entabla consigo misma, con el amado ideal, con el mundo circundante y con la poesía. Tal vez «Poesía», con mayúscula, sea una forma más adecuada, que supone, más que un antropónimo, un verdadero teónimo, pues pocas veces lo poético ha sido elevado a categoría divina como en los versos de Seda Cruz. No se trata de una deidad ásperamente veterotestamentaria, dada a derribar murallas y agostar campos desde el aborrecimiento, ni indolente y epicúrea como los dioses de Ovidio, sino una presencia creadora que es para la autora, como lo fue en sus días para Juan Ramón Jiménez, la conciencia íntima de lo Bello.
– – – Un cristal de aumento para el conocimiento – – –
Como para Pedro Salinas, norte y guía de todo buen poeta (hágame caso), la poesía es para Seda Cruz vehículo de conocimiento. El verso es cristal de aumento con el que se vislumbra la verdad que subyace bajo la apariencia externa de la realidad. La metáfora le permite ahondar en la indagación de lo existencial, con vistas a dar con respuestas que abriguen la conciencia, a modo de taza de chocolate humeante el quince de enero. Con la lente poética escruta la autora su propia esencia y en ella encuentra, paradójicamente (o tal vez no tanto), la de todos los demás.
– – – Sobre 4 pilares se levanta la poesía de Seda Cruz – – –
El lector notará, sin lugar a dudas, que su poesía tiene algo de oráculo de Delfos y mucho de literatura sapiencial. El aprendizaje vital, el desarrollo personal, la depuración del amor y la exaltación gozosa de la realidad son los cuatro pilares temáticos sobre los que se levanta este magnífico templo de capiteles corintios. La imagen no es caprichosa, ya que los capiteles corintios estaban formados por hojas de acanto y la naturaleza o, más bien, la Naturaleza, envuelta en aires panteístas, es nuclear en la poesía de esta autora.
– – – Una brisa con musicalidad – – –
No creamos, no obstante, que esta reflexión de pensamiento actúa en menoscabo de los extraordinarios valores sensoriales de su poesía. Su instinto creador sabe hacer sabia suma de ambos rumbos: el concepto y la musicalidad. Como en toda buena poesía, en la lectura en voz alta se aprecian enteramente los encantos de su verso, rebosantes de asonancias, aliteraciones, ritmos secuenciales y cadencias que tienen tres cuartas partes de brisa austral y una parte de galerna viva.
La marcada propensión a expresar su propia intimidad la aproxima a la corriente neorromántica de algunos poetas de la Generación del 27, cuyo magisterio es más que patente, o a la línea intimista de Bécquer y Rosalía de Castro, lejos de los pulsos mecanizados que se distinguen en muchos poemarios publicados en el siglo XXI. La poetisa combina, en fin, en su crisol lírico lo centrífugo y lo centrípeto, poesía bumerán de suave retorno.
Por último, si me lo permite, un consejo: encienda la luz, acomódese, ponga una pierna sobre la otra y, en la poesía de Seda Cruz, encuentre lo que, acaso sin saberlo, estaba buscando.
© poema de Seda Cruz con el nº 49 incluido en el libro «Nuevo despertar» © ilustración de Víctor Rivas
Comuníquese con esta autora: Seda Cruz
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Aquí le dejamos su última intervención.
Entrevista a Seda Cruz, poeta y profesora de Literatura. «La poesía como herramienta para conocerte»
Ester –
Me ha encantado «Nuevo Despertar»,
poemas que llegan al corazón, especialmente los versos del poema Poetisa: «Poetisa de luna nueva…» e «Hirieron mi piel de seda los fantasmas de otro tiempo…»